domingo, 15 de noviembre de 2015

¿Volverá a ser Navarra lo que fue?

“Esta puerta está abierta a todos, pero sobre todo el corazón”

Navarra, volver a ser la que siempre ha sido
Todos recordamos el lema de nuestros infanzones que luce en el Palacio de Navarra: “Pro libertate patria gens libera state!”. Me tomo la licencia de hacer una traducción adaptada: “Para que Navarra sea libre, que los navarros también lo seamos”.
Esta divisa se hace más actual en estos momentos de la historia en los que quienes quieren anexionarnos a Euskadi, Euskal Herria.., para separarnos de España se han adueñado del Gobierno de Navarra y de la mayor parte de nuestros ayuntamientos.

 “Para que Navarra sea libre,
que los navarros también lo seamos”
Cuando el plan de ruta de algunos partidos políticos está vinculado con la pérdida de la identidad de Navarra en favor de otra comunidad, cuando pretenden hacernos olvidar nuestra historia y tradiciones ancestrales por medio de la manipulación y la falta de rigor, cuando los que deberían manifestar coraje y valentía por defender esta tierra no lo hacen, es precisamente ahora cuando se requiere apelar a los valores y significados más profundos de lo que supone ser ciudadano navarro en España y, por ende, en Europa.
A los partidos que defienden la identidad de Navarra dentro del ordenamiento constitucional se hace urgente el requerimiento por el trabajo en favor de la salvaguardia de nuestra personalidad.

La historia juzgará a quienes ahora ocupan el Palacio de Navarra, pero también a los que podemos trabajar y dar un paso al frente, superando la comodidad y la indiferencia.
El compromiso de todos los demócratas que amamos y defendemos Navarra tiene que ser firme y sin fisuras, sin miramiento alguno al fracaso. De esta manera conseguiremos que nunca más vuelva a ondear la bandera de la Comunidad Autónoma Vasca en el Ayuntamiento de Pamplona, que las discriminaciones por razones ideológicas o sociales no vuelvan a impedir la igualdad de todos los ciudadanos ante las instituciones y los entes públicos.
Termino citando la inscripción que figura en el dintel de la puerta principal del Ayuntamiento de Pamplona, y cuya traducción dice así: “Esta puerta está abierta a todos, pero sobre todo el corazón”.
Así, con coraje, trabajo y cercanía, Navarra tiene que volver a ser la que siempre ha sido. 
Juan Cañada Guallar

Tiene razón Juan, y la jota de Alberto Gurrea, cantada con Laly Jausoro, aunque no invita precisamente al optimismo, apunta en la misma dirección:


1 comentario:

Echenique dijo...

Yo soy entre optimista y muy optimista. Navarra es mucho Navarra y, llegada la ocasión, saca fuerzas de donde sea. Su riqueza está en su variedad, en su historia, en su futuro solidario español y europeo. Es quizás uno de los antiguos Reynos más universales del mundo. Un tal javier nos lo demuestra. Él está con nosotros y Miguel de Aralar también. No dejemos que nos lo arrebaten los guipuchis.